RIBERA TOMA CONTACTO CON SU FUTURO CLUB Y PROMETE UN ADEMAR AMBICIOSO

El futuro entrenador del Ademar León, Jordi Ribera, aterrizó ayer en León en una visita relámpago, para tener su primera toma de contacto con el club leonés, y aseguró que afronta "un gran reto", al tiempo que garantizó que se verá "un Ademar muy ambicioso", dijo. "A partir de ahora sé que voy a tener la responsabilidad de entrenar a un equipo que no tendrá el objetivo de la permanencia o de meterse en competiciones", explicó el catalán, quien indicó que asume "estar en un equipo ganador y un equipo con máxima ambición y evidentemente tendré que estar a la altura de esas circunstancias".

Ribera considera un "error" que en el Ademar se le compare a partir de ahora con Manuel Cadenas que deja la entidad después de trece años al frente del equipo leonés. "Sería un error compararme con Cadenas", señaló Ribera, quien dejó claro que "a nivel personal, por mucha relación que tengamos, somos dos personas completamente diferentes, aunque es cierto que compartimos muchas ideas conjuntas a nivel técnico y de mentalidad deportiva", aclaró.
Respecto al próximo proyecto deportivo Ribera afirmó que "la confección de la plantilla dependerá de la clasificación que obtenga el equipo al final de la temporada, porque participar en la Liga de Campeones será distinto que hacerlo en la Recopa o en la EHF a la hora de hacer fichajes", advirtió.
Según indicó Ribera "el listón que deja Manolo Cadenas en el Ademar es muy grande y no deja de ser un reto, y está claro que con la trayectoria que llevo y en los lugares que he estado, miedo no me da, pero sí respeto".
El nuevo entrenador del Ademar tomará las riendas del club el próximo día 1 de agosto, después de finalizar los juegos Panamericanos, donde el catalán participará al frente de la selección de Brasil.